La Vía Blanca es una de las carreteras más importantes y emblemáticas de Cuba. La construcción de la Vía Blanca comenzó en 1945 como parte del Plan de Remodelación de La Habana, impulsado por el arquitecto y urbanista Pedro Martínez Inclán.
Fue inaugurada oficialmente en 1959, con la apertura del Puente de Bacunayagua, que conecta las provincias de Mayabeque y Matanzas.
Su objetivo principal era conectar la ciudad de La Habana con la ciudad de Matanzas y la localidad turística de Varadero, facilitando el acceso a las playas y otros destinos turísticos.
Aspectos de interés
Longitud: Aproximadamente 138 km.
Carriles: La carretera tiene cuatro carriles en su mayor parte, con algunos tramos divididos.
Paisajes: La Vía Blanca ofrece vistas panorámicas del litoral norte de Cuba, bordeando la costa y pasando por numerosas playas de arenas blancas.
Puente de Bacunayagua: Este puente, que cruza el Valle del Río Bacunayagua, es el puente más alto de Cuba, con una altura de 103,5 metros sobre el nivel del mar.
Importancia: Es una de las carreteras más transitadas de Cuba, ya que conecta dos de los destinos turísticos más populares del país: La Habana y Varadero.
La Vía Blanca no solo es una vía de transporte, sino también un símbolo de la belleza natural y la infraestructura de Cuba.